Holy Cross School Original Big
Historia

Wed, Jan 16, 2013

Marla Novo

Marla Novo - Catalizadora de Archivos y Colecciones

Artefacto del mes: feliz 150 aniversario de la escuela Holy Cross

Muchos sostienen que los mejores años de la vida son los de la escuela secundaria. Yo no estoy tan de acuerdo. De hecho, diría que algunos de mis años más preciados fueron aquellos que pasé en la escuela primaria. Desde aprender a leer hasta conocer las reglas del patio de juegos, la escuela primaria sigue ocupando un gran lugar de mi memoria colectiva.

En la década de 1970, fui a la escuela Holy Cross, que lleva aquí mucho más tiempo que eso. Este mes es el sesquicentenario de la escuela. Se cumplen 150 años de educación en la colina que mira desde lo alto a todo Santa Cruz.

Fundada en 1862 por las Hijas de la Caridad, la escuela también funcionaba como un orfanato. Un grupo de cinco religiosas, liderado por la hermana Corsina (quien se convertiría en la primera directora) viajó hasta Santa Cruz y fundó el campus.

Holy Cross School Original Big

Encontré esta foto en los archivos del MAH. El edificio de tres pisos con la entrada en Mission St. parece muy majestuoso comparado con la escuela actual, que se construyó en 1958, y con el edificio de la escuela secundaria construido en 1977. Mi hijo está de acuerdo en que el edificio de esta foto parece “muy grandioso” en comparación con el que asistió durante ocho años.

Holy Cross School Today From Street

Si bien algunas cosas acerca de la escuela Holy Cross han cambiado, hay otras que se mantienen igual. La columnata que conecta el kínder con el 8vo. grado reviste el corredor donde en 1er. grado me golpeé la cabeza contra uno de sus postes metálicos (y donde mi hijo hizo lo mismo en el kínder). La hermana Bárbara ha supervisado los festivales anuales de Navidad durante 40 años y aún sigue firme. Se alienta sentirse orgulloso de uno mismo, el profundo respeto y el servicio a los demás. Incluso el baño de varones sigue despidiendo el mismo aroma (no diría feo, sino inconfundible) que hace algunas décadas.

Luego de asistir a esta celebración sesquicentenaria y de conectarme con antiguos compañeros y nuevos amigos, me consuela saber que todavía existe esa sensación de comunidad entre estudiantes, alumnos, padres y docentes. En un mundo donde todo cambia, donde las personas se mudan o entran y salen de nuestras vidas, resulta tranquilizador que haya cosas que permanezcan igual. Puede parecer diferente, pero la escuela Holy Cross todavía se mantiene en la misma colina. Esta primavera, mi sobrino se suma a los graduados. Hay mucho por celebrar, y muchos recuerdos nuevos por crear.

Feliz cumpleaños, Holy Cross ¡Vamos, Panteras!